La Luz del mundo
Siempre es aconsejable mantener la serenidad y el aplomo suficientes para ser dueños de nosotros mismos. Ser dueños de nosotros mismos...
La mente es el rey de los sentidos, es la que nos puede permitir lograr lo que nos propongamos, es el motor de nuestro SER. Es una herramienta. Una herramienta que tiene que estar en perfectas condiciones para realizar su trabajo.
Lo que más afecta a la mente son los sentimientos, las emociones, las pasiones. Unos son como el aceite, otros son como la herrumbre. Unos facilitan la acción de la mente y los otros la entorpecen.
En torno nuestro hay mucha oscuridad mental, y también hay personas que con su Luz iluminan nuestro camino. ¡Que suerte cuando las encontramos!
En determinado momento, se encuentra con un amigo. El amigo lo mira y de pronto lo reconoce. Se da cuenta de que es Guno, el ciego del pueblo.
Entonces, le dice:
-¿Qué haces Guno, tú ciego, con una lámpara en la mano? Si tú no ves..
Entonces, el ciego le responde: – Yo no llevo la lámpara para ver mi camino. Yo conozco la oscuridad de las calles de memoria. Llevo la luz para que otros encuentren su camino cuando me vean a mi…
No solo es importante la luz que me sirve a mí, sino también la que yo uso para que otros puedan también servirse de ella.
Cada uno de nosotros puede alumbrar el camino para uno y para que sea visto por otros, aunque uno aparentemente no lo necesite.
Tenemos en el alma el motor que enciende cualquier lámpara, la energía que permite iluminar en vez de oscurecer…
2 comentarios:
Mañana te regalaré un libro. Espero que te guste.
Sempre trobes coses precioses que compartir amb els que llegim este blog. Moltes gràcies!
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