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miércoles, 11 de octubre de 2017

España ha sufrido 3 abducciones

Cuando nos duele la tripa, buscamos un remedio que nos alivie ese malestar. Si el dolor es muy fuerte y persiste, lo que necesitamos es un purgante que nos limpie el sistema y permita que se regenere para su correcto funcionamiento.

Nuestra mente, nuestro sistema de pensamiento, tanto a nivel individual como colectivo, como sociedad, tambien sufre periódicamente de fuertes "dolores de tripa" que requieren de un tratamiento que nos limpie la suciedad intestinal (en sentido figurado, por supuesto) y nos permita ver con claridad cuál es el problema y la mejor forma de solucionarlo.

Volver la mirada al pasado es, en muchas ocasiones, la mejor forma de buscar solución al problema presente. Es para lo que sirve la Historia.

Hoy he disfrutado de esta charla del gran maestro Julio Anguita en la que da un repaso a la historia politica reciente de España y Europa, para entender lo que está pasando con el independentismo catalán y la "democracia", en España y en el mundo.

Disfrutadla.





domingo, 26 de agosto de 2012

La educación prohibida

¿Cuántas veces hemos oído que la Educación está fallando, que el Sistema educativo fracasa? ¿Qué pensamos nosotros de todo esto? ¿Es culpa de los maestros y profesores? ¿Es culpa de los padres? ¿Es la Sociedad en general la culpable de este fracaso, de esta crisis? ¿Hace falta más disciplina? ¿Hay que fomentar el esfuerzo, el sacrificio, el sufrimiento?

¿Qué materias son importantes en el curriculo? ¿Qué hay que tener en cuenta a la hora de educar? ¿Dar más importancia a las ciencias o a las letras? ¿Fomentar los objetivos, los resultados?

¿Hacen falta más medios, más inversión? ¿Falta preparación por parte del profesorado? ¿Mejor aumentar el tiempo lectivo? ¿Segregar al alumnado por sexos? ¿Aumentar los deberes de casa? ¿Poder repetir curso?
¿Obligatoriedad hasta los 16 años, o hasta los 18?

¿Realmente consideramos que la Educación es importante? Y, si es así... ¿por qué y para qué?

Tal vez estás leyendo esto y esas preguntas te las hayas planteado en más de una ocasión. Tal vez seas padre o madre (o lo vas a ser pronto) y te preocupa cómo dar una buena educación a tus hijos e hijas. También puede ser que la educación sea tu profesión, o incluso tu vocación...

Probablemente, tengas las ideas muy claras. Pero, tal y como están yendo las cosas, estoy convencido de que la película que os presento ahora os hará reflexionar sobre cosas que se están olvidando. Cosas básicas que todos consideramos básicas pero que, por eso mismo, se nos olvidan.

Te recomiendo que te tomes el tiempo suficiente para su visionado y la reflexión posterior, si realmente piensas, crees o sientes que la educación es importante y merece una profunda evolución.

Luego, si queres, la comentamos.



sábado, 9 de junio de 2012

¿Cuándo comer la fruta?


He recibido un correo que me parece interesante compartir con todo el mundo con la esperanza de que, si es cierto lo que dice, pueda beneficiar a todos. Y si no es cierto, que pueda ser rebatido por los que tengan razones para ello.

Dice así:

Hola a todos:


     Deberíamos de concienciarnos todos de que con una mínima atención y cuidado de nuestra salud se podría sobrellevar mejor, con mayor calidad de vida cualquier enfermedad, e incluso evitarla. Cuidamos cualquier objeto o decorado de nuestra casa. El coche, que nos ha de servir para disfrutar de él  y para desplazarnos al trabajo, lo cuidamos limpiándolo de vez en cuando por dentro y por fuera por lo agradable que resulta verlo limpio, utilizamos aceites de buena calidad para prolongar la vida del motor...pasamos la I.T.V. y nos esmeramos en que esté en condiciones......y sin embargo, algo tan importante como es nuestro cuerpo, que no disponemos de otro, pensamos que es un todo terreno y se deja olvidado a pesar de que él nos habla constantemente y nos avisa de lo que está ocurriendo en nuestro interior. Deberíamos de conectar más a menudo con él y así llegar a tiempo para evitar males mayores y mejorar la calidad de vida. Así de fácil.


     Hay que extender la idea de que cuando nuestras defensas (sistema inmunitario) están altas, no hay enfermedad por muy grave que sea que pueda con nadie. Incluso el cáncer se puede mantener a raya y ser vencido. Con sólo una persona que cuide su salud y su alimentación al transmitir esto, habrá valido la pena. Para concretar, hay que evitar: la leche animal y derivados lácteos (por todo lo que ya sabemos); las carnes, por la cantidad de hormonas naturales y artificiales altamente cancerígenas (acidifican la sangre y los tejidos y al haber escasez de oxígeno a nivel celular se desarrolla fácilmente el tumor). Para conservar la salud y evitar cánceres, inflamaciones, etc..., nuestra sangre ha de ser un 80% alcalina y un 20% ácida. Ese 80% lo obtenemos de las frutas y verduras. Uno de los mejores frutos alcalinos es el limón, que aunque es ácido, se vuelve altamente alcalino al entrar en nuestro organismo. Pero estamos tan mal informados que la alimentación la hacemos cada vez más deficiente. Creo que la culpa de que el ciudadano de a pie ignore cómo alimentarse correctamente la tiene, en parte, nuestra medicina oficial o alopática, que desde siempre ha defendido que " hay que comer de todo", sin tener en cuenta algo primordial que es la compatibilidad e incompatibilidad de los alimentos que se ingieren, pues de ahí va a derivarse que estemos sobrealimentados pero mal nutridos. Al contrario de lo que debería ser, tomamos un 80% de alimentos que acidifican la sangre y los órganos (hacemos justamente lo contrario). Los alimentos enlatados (en conserva) todos llevan aditivos y conservantes igualmente cancerígenos que producen tumores en el hígado, riñones y próstata e intestinos. En cuanto a las frutas, debemos considerar lo siguiente: no mezclar ninguna de ellas con el melón, ni ninguna de ellas con la sandía. Tampoco mezclar melón y sandía, por incompatibilidad. El melón hay que comerlo sólo y la sandía también. No mezclar fruta dulce con ácida.......y sobre todo NUNCA la fruta como postre, por lo ya expuesto. La medicina y nutrición ortomolecular recomienda pelar la fruta por la cantidad de pesticidas y químicos que en la actualidad tiene; cualquier fruta hay que ingerirla bien masticada y si es posible el zumo obtenido en la licuadora....y  SIEMPRE  media hora antes de cualquier comida ó entre comidas. ¿MOTIVO?: La fruta pasa en 20 minutos aproximadamente del estómago al intestino y es en la primera porción del duodeno donde se asimilan sus nutrientes pasando a la sangre enseguida y a la mitocondria celular de los tejidos, nutriendo con efectividad a las células y aportando a los tejidos vitaminas, oligoelementos y enzimas que son imprescindibles para desintoxicar, neutralizar radicales libres, NUTRIR eficazmente y fortalecer los organos.

      Desde siempre, tenemos el hábito equivocado (y sigue extendido a nivel mundial) de tomar la fruta como postre después de las comidas. Es un gran error que se nos ha transmitido, y..... digo por qué. Al hacer esto, la fruta que tenía que asimilarse en el intestino no lo puede hacer, pues al mezclarse con la comida que hemos tomado momentos antes (las proteinas, hidratos, grasas) no tiene más remedio que quedar retenida en el estómago durante horas en un medio ácido (si se ha comido alimentos protéicos como carnes, pescados) o en un medio donde predomina la bilis si se ha comido alimentos grasos. Así pues, la fruta queda bloqueada y sin poderse asimilar sus nutrientes, formándose en el estómago fermentaciones nocivas que conllevarán a patologías digestivas e inflamaciones intestinales importantes y a la desnutrición con los problemas que ello conlleva.
     

domingo, 13 de noviembre de 2011

Problema, reacción, solución

Acabo de visualizar una entrevista a David Icke llevada a cabo por Suzanne Powell. La entrevista es larga y he aprovechado un madrugón en domingo para verla entera de una tacada.

Ciertamente, nada de lo que dice David me resulta extraño. La sincronicidad de la vida es algo que constato diariamente, así como que casi siempre es más seguro y efectivo hacer caso de la propia intuición (lo que llamamos el corazón) que obedecer a la mente. Cierto es que esta mente es producto de un Sistema, milenario ya, que nos ha educado según unos parámetros que fueron diseñados para someter a la humanidad, para idiotizarla y hacerla manejable por parte de un pequeño colectivo de gente que ostenta el poder y que tiene miedo a perderlo.

Lo que en la antigüedad requería muchos años de cambio y manipulación, ahora se puede ver y percibir en el transcurso de una vida, incluso unso pocos años. Sólo se necesita estar un poco despierto y ver cómo nos manipulan con la alimentación, con los medicamentos y vacunas, con los miedos irracionales, con el terror político y financiero (dado que el miedo al infierno ya no funciona).

Llevo toda la vida convencido de que voy a ser testigo de grandes cambios en la Humanidad. Y he sido consciente de que estos cambios pueden sobrevenir a través de mucho sufrimiento o a través de mucha generosidad. Todo depende de la postura que adoptemos todas y cada una de las personas que estamos experimentando en el mundo en estos tiempos.

Muchos son los esfuerzos que se realizan en uno y otro bando. Muchas veces me he preguntado si, en realidad, los políticos y líderes sociales y religiosos no son los "buenos de la película" sino todo lo contrario: son los manipuladores de la mente y la opinión de los hombres y mujeres temerosos de perder lo que tienen, lo perecedero.

Movimientos como el 15M, los "INDINADOS", y otros con menos proyección mediática, me dan la esperanza de que el cambio de conciencia ya es inevitable. Y todos podemos ser partícipes de una forma muy sencilla: perder el miedo y bajarse del sistema.

lunes, 24 de mayo de 2010

Seguimos sin rumbo, ¿a quién le importa?

Leo un artículo del diario INFORMACIÓN de Alicante, en su suplemento dominical del 23 de Mayo, titulado "Suspensos en esfuerzo", y me reafirmo en mi convicción de que está lejos el día en que la Educación en España y más concretamente en la Comunidad Valenciana se encamine con paso firme hacia la consecución de sus objetivos con unos mínimos de Calidad equivalentes a los de los países más avanzados.

El artículo puede que sea poco profundo, que recoja de forma imprecisa la opinión de los diversos colectivos, o que roce apenas los problemas que afectan a nuestro Sistema, pero lo más significativo son los comentarios que sobre el tema se vierten en la edición digital del diario. Seguimos tirándonos los trastos unos a otros, sin aceptar de forma abierta y honesta las responsabilidades de cada uno. El profesorado responsabiliza del fracaso a los padres incultos e irresponsables, a la escasa financiación, y a los caprichos de los políticos de turno. Los padres achacan los males del Sistema educativo a un profesorado desmotivado y falto de vocación, además de a una legislación que constriñe al alumnado. Los alumnos son los que demuestran más sentido común al aceptar su parte de responsabilidad, aunque al propio tiempo señalan que sufren la incomprensión de un profesorado que se limita, en muchos casos a dar la clase sin desarrollar debidamente los temas y conceptos.

Y los políticos se dedican a echar balones fuera, culpando de todo al contrario, y dificultando en lo posible una solución que dé votos a los otros.

Mientras tanto, los alumnos que tienen la mala suerte de tener una familia desestructurada y conflictiva, son los grandes perdedores sin comerlo ni beberlo. Son ellos los que pagan en primera persona los platos rotos de una sociedad que tan individualista que ha dejado de tener entidad social, tan sólo es una suma de individuos que sólo ven su propio ombligo.

El barco va a la deriva y los que más gritan son los que menos capacidad tienen de resolver nada.

Mi homenaje y gratitud a todos esos profesores y maestros que cada día luchan para tratar de compensar las dificultades que se encuentran en sus aulas con el respeto, el esfuerzo y la escucha a sus alumnos. Maestros que cada día aprenden con sus alumnos, evolucionan con ellos y viven con ellos.

jueves, 11 de marzo de 2010

¿Negocio o servicio?

¿Es la Educación un negocio o un servicio público?

Tal vez ésa sea una de las claves para comprender la situación en que se encuentra la Educación en España. A pesar de las numerosas voces que dicen y repiten que el nivel educativo en España es pésimo, la realidad, los resultados, indican que estamos en el nivel intermedio de los países de nuestro entorno, tanto en cuestión académica como cultural y moral.

No obstante, como lo que todo el mundo queremos es llegar a la excelencia, a lo mejor de lo mejor (muchas veces por puro sentido competitivo), nos damos cuenta de que hay muchas cosas que mejorar en nuestro Sistema educativo.

Y aquí viene el por qué de mi pregunta. Estamos en una sociedad de consumo. Lo que mueve el progreso, el avance tecnológico y social, es el consumo y el negocio que éste conlleva. También estamos en una sociedad que demanda un alto nivel de los servicios que recibe a cambio de sus impuestos. Queremos una Sanidad de la mejor calidad, y de hecho la tenemos. Queremos un servicio de Seguridad pública y de mucha calidad, y cada día comprobamos que tenemos muy buenos cuerpos de fuerzas armadas y policía nacional (la local va mejorando poco a poco) y cuerpos de bomberos y emergencias muy cualificados, aunque faltos de mejor inversión.

Con la educación, ¿qué pasa? ¿Cómo consideramos a la Educación? ¿Es un Servicio público? ¿Es un negocio? Si fuese un negocio, los consumidores exigiríamos la mayor calidad por el precio que estuviésemos pagando y, evidentemente, la mejor educación la recibirían los que pudiesen pagarla. Si la considerásemos un Servicio público, exigiríamos a nuestos politicos que estableciesen formas de evaluar desde el usuario el servicio prestado por cada Centro y por todo el Sistema en general, tal y como hacemos con la Sanidad o con la Seguridad públicas.

Pero creo que ocurre que no somos conscientes de que la Educación, como Servicio público, nos afecta a todos durante toda nuestra vida, y no sólo mientras somos alumnos o somos padres con hijos en edad escolar. Evidentemente, los docentes son los profesionales que están al servicio de los ciudadanos, tal como los médicos, policías, magistrados y demás funcionarios del Estado. Pensamos que, cuando nuestros hijos han terminado su etapa escolar obligatoria, lo que pase con el Sistema educativo ya no nos afecta. Y por eso no tenemos en nuestra percepción de necesidades básicas que la Educación es una de ellas. Por eso, cuando se publican encuestas sobre lo que más preocupa a la población en determinados momentos, la Educación no está entre lo que más preocupa. Por eso no echamos de menos que, en sus campañas electorales, los diferentes partidos no pongan a la Educación en los primeros lugares de la lista.

Tal vez deberíamos reflexionar sobre qué es para nosotros la Educación, para qué sirve, qué valor le damos, y qué esperamos de ella, para luego decidir si es un negocio, un Servicio público, ambas cosas o todo lo contrario.

Todo el mundo parece tener la solución y, sin embargo pocos parecen tener idea de lo que hablamos.

martes, 26 de enero de 2010

Nucleares

Parece un tema fuera del ámbito educativo, ¿verdad?. En mi opinión, todos los temas pueden ser adecuados para fomentar el debate, la reflexión, el conocimiento de uno mismo (que eso es, al fin y al cabo, la educación).

Estos días se suscita el debate en torno a la ubicación de los vertederos de resíduos nucleares.

A nadie le gusta tener la basura, la doméstica, cerca de su casa. Es molesta, olorosa y, sobre todo, peligrosa si no se mantienen ciertas condiciones de control y seguridad.

Y la basura nuclear es todavía más peligrosa que la doméstica. Sin embargo existe, y hay que guardarla en algún sitio. Al principio de esta tecnología, sus resíduos se vertían al mar en bidones más o menos estancos. En aquella época, nadie pensaba en la futura Humanidad. Ahora, sin embargo, aunque es más segura que entonces, sigue siendo una fuente de energía similar a King-Kong, parece que está sujeta pero puede soltarse en cualquier momento, por cualquier error o accidente.

Ahora escuchamos a los políticos decir muchas sandeces. No todos, claro. He escuchado hoy a Santiago Carrillo en una entrevista en Telecinco, diciendo que la ubicación de esos vertederos que nadie quiere, debería decidirse de forma científica, tras estudiar geológicamente el terreno y tras cotejar las necesidades reales para este tipo de instalación. Evidentemente, es menester dar el máximo de información a la ciudadanía para evitar el miedo y el rechazo irracional.

Lo que resulta paradójico es que personas que están a favor de la tecnología nuclear, ahora se manifiesten contrarios a tener cerca instalaciones para almacenar sus resíduos. Y que para ello aporten razones del tipo de sus comarcas ya se sacrifican manteniendo las centrales (con lo que admiten su alta peligrosidad), y ahora toca a otras comarcas que utilizan la energía generada por las nucleares, asumir el almacenamiento de sus resíduos. Partidos políticos que llevaban en sus proyectos el fomento de la energía nuclear, ahora no toleran que se ubiquen los vertederos en sus territorios.

Y lo más curioso es que consiguen que el debate se fundamente sobre estos postulados. Yo creo que lo único que les preocupa es el rendimiento electoral que les puedar proporcionar todo esto.

Las centrales nucleares deberían desaparecer, y con ellas, sus resíduos. Son caras, peligrosas y nada longevas.

domingo, 27 de diciembre de 2009

El Pacto educativo y la cultura del esfuerzo

Se acerca el momento en que se ha de plasmar la posibilidad o no de un Pacto de Estado sobre la Educación en España.

El Ministro, Ángel Gabilondo, ha apostado por él desde el principio de su compromiso con el Ministerio de Educación. Al no querer incluir en el borrador de este pacto los aspectos ideológicos más espinosos, demuestra su inteligencia y su conocimiento del tema y de las carencias del Sistema.

Desde la oposición y desde los sindicatos se valora mucho la inclusión en los puntos de discusión del acuerdo de la llamada "cultura del esfuerzo", una cultura en la que se potencia el compromiso y el esfuerzo del alumnado en el logro de los objetivos de su currículo. También se valora la inclusión de una mayor valoración de la "figura del profesor/a, su formación permanente, dotarle de recursos y promover la carrera docente".

A mí también me parece muy bien todo esto, así como el resto de los nueve puntos del Pacto. Pero yo incluiría también que se aplique el mismo criterio del esfuerzo al profesor/a, y que si no llega a un nivel adecuado, que se le suspenda y que vuelva a reciclarse, dejando su puesto a gente que sí cumpla con ese compromiso y ese esfuerzo. Siempre se hace recaer toda la responsabilidad del fracaso educativo sobre el alumnado, cuando todos sabemos que, en realidad, no hay malos alumnos sino malos profesores. Y eso se constata todos los días en los Institutos de toda España. En ellos vemos a profesores y profesoras que se esfuerzan en ayudar a sus alumnos a interesarse por su propia eduación, que cuentan con las familias facilitándoles el acceso y la participación, y que tratan a sus alumnos como a personas.

Y también vemos a profesores/as que no cumplen con su compromiso de esfuerzo, que desprecian a sus alumnos, que se limitan a dar su clase sin importarles si son comprendidas sus explicaciones, que no admiten la participación de las familias, que sólo creen en la cultura del "respeto a través del miedo", que son autoritarios, que resultan antipáticos y desagradables en el trato, que desprecian a los alumnos con baja autoestima, que no se comprometen con sus propios compañeros/as...

Todos lo sabemos, pero nadie quiere afrontar el tema con la suficiente valentía. Se nos dice que también hay padres que merecen palos. Y es cierto, pero de eso sí se habla. Y muy abiertamente. Sólo que, para ser padre o madre no se estudia y no se cobra por ello un sueldo del Estado.

Hasta que no entendamos que todos, padres, profesores, medios de comunicación y sociedad en general, todos somos educadores, que para educar hace falta la tribu, hasta que no entendamos bien esto, los pactos y los acuerdos serán incompletos e ineficaces. No es el dinero ni las instalaciones las que fomentan y favorecen una Educación de calidad. Son las personas, los educadores, los que marcamos la diferencia.

miércoles, 2 de diciembre de 2009

Crisis también en Educación

La palabra crisis implica un proceso de cambio. En este sentido el mundo, la sociedad y todos sus ámbitos están (estamos) en contínua crisis. Y es que, con la aceleración que conlleva el alto nivel de comunicación global, los actos y decisiones a cualquier nivel conllevan reacciones casi inmediatas y provocan cambios en las necesidades de los ciudadanos, de la Humanidad.

Y es la Educación el ámbito que ha registrado el cambio más lento en sus estructuras y en sus planteamientos, mientras que las necesidades de sus usuarios han ido variando de la forma más acelerada imaginable aun por los mismos que utilizan sus servicios.

Sólo los paises, las culturas que han sustentado su razón de ser en la Educación, están en disposición de afrontar los demás cambios, el resto de las crisis que afectan a todo el mundo, de una forma más efectiva, con mayor nivel de garantías de éxito.

En España, que se muestra como un país para nada uniforme, donde cada Autonomía decide cómo y cuándo adecuar y asignar sus recursos a sus propios intereses (casi siempre partidistas), las necesidades educativas son afrontadas de desigual manera.

Desde el Gobierno central se intenta vertebrar medidas que impulsen la inversión y la satisfacción de las necesidades en materia de educación, pero las distintas administraciones autónomas utilizan esos recursos como mejor les parece o, como ocurre con la Comunidad Valenciana, deja perder esos recursos para no dar méritos a su rival político. Tal es el caso de los 11 millones de Euros destinados a incrementar la oferta pública en el primer ciclo de Educación Infantil. También es cierto que el Partido Popular cree más en la iniciativa privada y prefiere subvencionar o concertar los centros privados, con el consiguiente incremento de gasto, tanto público como privado.

Ayer hubo manifestaciones en las tres capitales de la Comunidad Valenciana, pidiendo la dimisión del Conseller, o por lo menos un cambio de 180º en su política educativa. Los 13 puntos de la Plataforma son pocos, resumen sobre todo las necesidades del profesorado y habría que añadir las inquietudes y las necesidades de los padres y madres, los verdaderos usuarios del servicio educativo a través de sus hijos e hijas. No obstante, bueno es que se movilice la sociedad ante la inoperancia y la ineptitud de los dirigentes políticos.

El peligro de todo esto es que casi siempre, la rentabilidad de estas movilizaciones no es la misma para todos. Casi siempre, los que sacan tajada son los políticos de la oposición y los sindicatos. A los padres y madres se nos olvida pronto.

Por eso es bueno abrir foros de debate serios, donde sean tratadas las inquietudes y las necesidades de todos los sectores, tratando de no perder de vista que el objetivo principal de la educación no es crear puestos de trabajo docente ni administrativo, sino formar adecuadamente a los futuros ciudadadanos. Y en base a sus necesidades, se deben tomar las medidas oportunas, dejando de considerar al resto de los sectores que forman la comunidad educativa como rivales, sino como socios y compañeros.

jueves, 19 de noviembre de 2009

Un baremo del nivel educativo

Cuando surgen episodios de conflicto social, como el asunto del Alakrana, se puede apreciar en qué nivel cultural y social se encuentra un país. Y se puede apreciar también cuáles son los intereses que mueven a los partidos políticos que pretenden gobernarlo. Y los miedos que impiden a los que tienen esa responsabilidad reaccionar con asertividad y entereza frente al episodio en cuestión y frente a las voces agoreras que les gritan de todas partes para que cometan un error y se caigan. No importa el precio. Que se caigan.

El dilema al que tiene que enfrentarse cualquier persona con responsabilidades ejecutivas de gobierno es demasiado grande como para que se les juzgue sin más. Y encima, sin aportar alternativas.

Es bueno, cuando se considera cualquier asunto, conocer las causas y circunstancias que intervinen en él. Cuando en una familia los hijos (o hijas) cometen un error, quebrantan una norma o no hacen caso a sus padres, lo correcto es que se les haga ver que su comportamiento acarrea consecuencias desagradables. Y que deben compensar las consecuencias de sus errores. Sin violencias, con mucho amor, con el máximo respeto y con el mayor rigor.

Esa actitud en la educación de los niños y niñas, es la misma que habría que tener con los adultos que incumplen las normas sociales, las leyes que nos ayudan a convivir.

Es evidente que el pesquero Alakrana hizo caso omiso de las recomendaciones y advertencias de que no salieran de la zona de seguridad frente a las costas somalíes. Eso les convierte en responsables de sus propias acciones. Y, aunque es preciso hacer todos los esfuerzos para salvarles la vida, ellos o quienes tuviesen la responsabilidad de enviarles a zonas de pesca no seguras, deben hacer frente a su responsabilidad en los hechos. Han puesto en peligro y en evidencia las relaciones, siempre difíciles, de nuestro país con un país sin gobierno y sin ley. Sin contar con el esfuerzo de presupuesto y de vidas de militares que se ven obligados a arriesgarla para sacarles de situaciones que sólo ellos (los pescadores) han provocado.

Ahora, con lo del Alakrana, vemos qué es en realidad lo que pretenden y ansían los que desean el poder. Lo que molesta a los que viven situaciones análogas al secuestro cada día, y se les recrimina que opten por pagar su propio rescate. La frivolidad de los que creemos y coreamos a los que critican sin más una actuación que ellos mismos no hubieran resuelto de mejor modo.

Cada día se hace más patente la necesidad de una auténtica revolución social basada en la educación verdaderamente libre y democrática de los ciudadanos. Y ese cambio no lo van a promover los políticos, ya que a ellos les conviene que los ciudadanos continúen con los ojos velados por lo que les pueda fascinar: la ilusión de un bienestar basado en el consumo. Esa revolución sólo puede nacer promovida por los filósofos o por acontecimientos sociales traumáticos. Hasta ahora, creo que ganan los últimos por goleada.

¿Cuándo conseguirá la inteligencia regular las emociones?

Los piratas y la pesca, desde el punto de vista keniata

jueves, 17 de septiembre de 2009

Respeto mutuo

Estaba yo expectante por saber qué polémica se generaría este curso en su comienzo. Y mira tú por dónde, el tema de la polémica es precisamente uno de los síntomas de la mala educación que se vive en nuestro país: la falta de respeto.

La polémica la genera el hecho de que se pretenda infundir en la sociedad, en los alumnos y sus padres, el respeto hacia los docentes a golpe de decretos. Y eso es, en sí mismo, un síntoma de la falta de visión de los gobernantes, aunque por otro lado sospecho que tienen la visión muy bien dirigida hacia sus intereses personales. Porque las Administraciones autónomas que han promulgado decretos en el sentido de igualar en rango a los docentes y a los policías y magistrados, están dirigidas por personas de marcada tendencia conservadora y decimonónica en sus postulados.

El respeto por la fuerza. Y para conseguirlo, nada mejor que un ambiente de falsa falta de respeto. Digo falsa porque esa falta de respeto se da, normalmente, en situaciones en las que previamente ha habido una falta de respeto previa en sentido docente-alumno, o docente padres.

Desde luego, hay padres que merecen que les quiten la patria potestad y la custodia de sus hijos. Pero también hay docentes que merecen que les expulsen de por vida del cuerpo de docentes, funcionarios o no. Todos conocemos casos en que esto es así. Y el hecho de dar prevalencia a la palabra del docente sobre la del alumno, es una falta de respeto hacia éste último y hacia la Justicia.

Dice Michael Davidson, responsable del informe Talis de la OCDE -que se publicó este año tras haber encuestado a 90.000 profesores de 23 países-, sobre la autoridad en las escuelas españolas, no habla de medidas disciplinarias. "Echando un vistazo a los datos de España, un mejor clima escolar se suele encontrar cuando los docentes tienen un contrato fijo y más experiencia, cuando colaboran entre ellos y cuando el tamaño de las clases es menor. Además, aquellos profesores que apuestan por la transmisión directa [menos participativa, en la que el profesor enseña y el alumno escucha de una forma más pasiva] suele percibir un peor clima escolar".

Según el informe Talis, las mayores diferencias de percepción del clima escolar, de las relaciones entre docentes y alumnos no se dan ni entre países (25%) ni entre centros de zonas distintas (10%), sino entre los profesores de un mismo colegio que dan clase cada día a los mismos alumnos (65%). También el tiempo que pierden haciendo callar a los alumnos -un tercio de la clase, de media, argumento sacado a relucir por Esperanza Aguirre al presentar su proyecto de ley- varía sobre todo dentro de un centro escolar; una vez más, distintos profesores frente a los mismos alumnos: un 85%. "Dado que la mayor cantidad de variaciones en la pérdida de tiempo lectivo se observa entre diferentes profesores dentro de los centros, parece más necesaria una política de prestar atención a las habilidades y la disposición de los profesores individualmente que mejorar el ambiente y la disciplina generales de los centros", concluye el informe.

En palabras de Mariano Fernández Enguita, no se puede pedir "autoridad para los profesores si no se les pide responsabilidad; mal puede exigir respeto un profesor que falta a menudo, llega tarde, no prepara sus clases, pierde el tiempo en el aula o ejerce arbitrariamente su poder académico o disciplinar. Y, haberlos, haylos". Y en cualquier caso, tampoco considera que "el desorden, los problemas de convivencia en los centros provengan de que los profesores no tienen autoridad, sino más bien de que no ejercen la que tienen. Antes de llegar a una infracción grave, sea falta de respeto, conducta disruptiva, violencia... ha habido sistemáticamente una larga colección de infracciones leves que no fueron afrontadas. Hay grupos que quieren blindar al profesor, pero no se preocupan de proteger al alumno. En mi opinión no estamos ante una revuelta juvenil, sino ante una crisis o dejación de la tutela adulta en los centros. Muchos de los conflictos laborales de los últimos años han sido porque no se quiere vigilar los recreos, los pasillos, las actividades extraescolares, los comedores..."

En resumidas cuentas, el respeto y la autoridad se ganan con el respeto que se ofrece a los demás. El respeto impuesto no genera un ambiente adecuado para una educación verderamente democrática e integradora, donde se aprenda a respetar por ética y moral ciudadana y no por imperativo legal. Eso no genera ciudadanos responsables, sino ciudadnos dependientes. Quizás sea ese el objetivo de los que proponen semejantes formas de organización educativa.

Pero también puede ser que todo sea una señal más de los tiempos que nos ha tocado vivir: un verdadero caos medioambiental. ¿No es la escuela un verdadero ecosistema?

sábado, 25 de julio de 2009

¿Esfuerzos justificados o inútiles?

Una de las características del ser humano es su gran imaginación. En realidad, la imaginación es una energía creadora de gran potencia, pero de efectos no inmediatos.

Estos días pasados en que se conmemoraba la llegada del ser humano a nuestro querido satélite, la Luna, hace cuarenta años, me llamaba la atención la gran campaña mundial orquestada en torno al evento. Y me preguntaba: ¿por qué? ¿por qué tanto interés ahora? Hace diez años no se le dió tanto bum-búm.

Por otro lado, coincidió el evento con el lanzamiento del transbordador espacial en otro viaje más hacia la estación espacial internacional. Esta estación está previsto que esté finalizada el próximo año. ¿Y luego, qué? ¿Cuál es el próximo paso? ¿Una colonia en la Luna? No, la Luna está demasiado cerca de la Tierra y puede verse afectada por lo que pueda sucederle al planeta en un futuro no demasiado lejano.

Lo próximo será una colonia en Marte. Es un planeta de condiciones y tamaño similares a la Tierra donde, con un esfuerzo asumible para acondicionarlo, se podría conseguir un asentamiento humano.

Todo esto trasciende la pura fantasía para entrar en el mundo de la imaginación. Siempre hemos mirado, la Humanidad, con fascinación al Universo, al cielo estrellado, y tal vez lo hayamos hecho con nostalgia. Porque, ¿qué sabemos de nuestros orígenes?

Ayer fué inaugurado el mayor telescopio del mundo, que está ubicado en nuestras islas Canarias, en la Palma concretamente, y se dice que puede explorar objetos que están a miles de millones de años luz de la Tierra. Es mucha distancia. Y es mucho tiempo, porque lo que se observa a esas distancias no es lo que acurre en la actualidad, sino lo que ocurrió hace miles de millones de años. Lo que tarda la luz que emitieron aquellos cuerpos en llegar a nosotros.

¿Y si nosotros ya hicimos, como Humanidad, un viaje que nos trajo a este planeta? ¿ ¿No es posible que seamos una especie nómada, que se dedica a expoliar planetas mientras evolucionamos hacia no sé qué formas o modos de Ser?

Y, por otro lado, también me asaltan preguntas como: ¿Todo eso es necesario? El gasto que representa investigar fuera de nuestro planeta, ¿no estaría mejor invertido en procurar resolver los problemas que nos acucian? ¿No sería mejor intentar salvar al planeta de los peligros que le acechan? ¿Con inversiones en Educación, en tecnología para la obtención de energía renovable, en formas de alimentación racional, etc...?

Y encima, me entero también de que el gobierno chino considera que en China falta mano de obra y ha decidido potenciar que las familias tengan dos hijos en lugar de uno. Si esto es cierto, la población mundial va a crecer a un ritmo todavía más acelerado y, en 25 años, habremos doblado el número actual. De 6.000 millones pasaremos a 12.000 millones.

Tal vez no sea tan descabellado que algunos círculos de poder consideren necesario emigrar para sobrevivir...

viernes, 12 de junio de 2009

¿Qué está pasando?

Es la pregunta que me hago cada vez que oigo noticias como la que ocupa estos días las portadas de todos los periódicos del mundo, de los noticieros televisivos y radiofónicos, de las tertulias de bares, cafés y plazas públicas.

¿Qué está pasando para que en un mundo en plena crisis se pagen 96.000.000 de Euros por un futbolista? Un mundo donde tanta gente está pasando verdaderos apuros para sobrevivir, y no estoy hablando de gente de países lejanos, sino de vecinos nuestros, de personas que han perdido el empleo y están entrampados con hipotecas y otro tipo de gastos a los que repentinamente no puede hacer frente. Frivolizar de esta manera con el dinero, con la energía social y económica es tan vergonzoso como regar el césped de un campo de golf en medio de una zona con racionamiento de agua.

Es como pisotear la comida frente a la gente que se muere de hambre.

Tal vez, este jugador no sea responsable directo de ésto, pero su imagen irá ligada siempre a esta paradoja, a este despilfarro.

No sé, yo creo que estamos asistiendo a un momento crucial en la degradación y confusión de los valores característicos de la humanidad. Esto no puede durar mucho tiempo más. Porque, o cambiamos o nos veremos forzados a cambiar.

Es mi opinión, y espero no ser un bicho raro. Sería muy triste.

miércoles, 13 de mayo de 2009

El caso de los "portátiles"

Que hace falta un gran Pacto social y político por la Educación se constata tras el anuncio del Presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, de suministrar un ordenador portátil a todos los alumnos de 5º de Primaria el próximo curso.

Hacerlo así, sin más, sin una planificación de la medida y de los recursos humanos, tecnológicos y de infraestructuras necesarios para su aplicación efectiva y eficiente, es señal de que en este país no hay verderas ganas de solucionar los problemas, sino de servirse de ellos para el propio beneficio político.

La medida de los ordenadores está muy bien. Pero si va sola y sin planificación, va a ser tirar el dinero.

Por otro lado, hay detalles, como el del sistema operativo preinstalado en los portátiles, que un gobierno socialista debería cuidar. El sistema Windows, de Microsft, aun siendo el de más uso y difusión, no es, en mi opinión, el más adecuado para fomentar la libertad informática y digital, libre de la dependencia de las grandes corporaciones monopolistas. Hoy en día el sitema Linux y sus variantes es la mejor opción para dejar de ser dependientes de las multinacionales. No resulta muy ético que, desde un gobierno, más si es socialista, se fomente lo contrario.

Además, no todos los profesores y maestros está capacitados para utilizar y enseñar a sus alumnos, los diferentes programas y utilidades en soporte informático. Será necesario capacitar previamente, o simultáneamente, a todo el profesorado en el uso de estas herramientas.

También hay que señalar que no todos los Centros educativos cuentan con infraestructuras de Internet adecuadas al uso masivo que se pretende impulsar. La inversión en este apartado va a ser colosal, y debería estar planificada.

Así pues, el tema no es baladí. El debate está abierto y será bueno que todos participemos en él, aunque sólo sea para demostrar a los políticos que al electorado le importan estas cosas.

sábado, 25 de abril de 2009

El 28, huelga

Ha sido convocada, por la Plataforma en defensa de la Educación Pública, una huelga educativa para el día 28 de este mes de Abril.

Aunque la convoca la Plataforma, formada por todos los sectores implicados de alguna forma en el tema educativo (menos la FAPA "Gabriel Miró") es evidente que la huelga es responsabilidad de los trabajadores de la enseñanza, ya que la huelga es un derecho que todo trabajador tiene para defender sus intereses cuando el camino del diálogo y la negociación se ha agotado.

Eso es lo que ha pasado en la Comunidad Valenciana. Y algo había que hacer. Este gobierno que tenemos aquí es merecedor de una huelga en todos los sectores de la sociedad. Peor no lo pueden hacer. ¿O sí?

Sin embargo, todas las cosas merecen ser meditadas con un poco de sosiego, porque a veces lo que nos pide el cuerpo y lo que nos conviene son cosas diferentes. Algo hay que hacer, eso está claro. Los profesores y maestros tienen todo el derecho, aunque yo diría que la obligación, de enfrentarse con valentía y decisión a sus empresarios en demanda de las mejoras necesarias para facilitar su importante labor. Eso lo hacen a través de sus Sindicatos, que para eso están. (Por cierto, es curioso que en algunos de ellos no se hace ninguna mención a esta huelga, ¿será que no la secundan?). Y pueden recabar para ello el apoyo y la comprensión de la sociedad, que es la que disfruta o padece los resultados del Sistema Educativo. En esta sociedad, los primeros interesados en la educación del alumnado somos los padres y madres. Y es por eso que los Sindicatos tienen tanto interés en ganarse la comprensión y el apoyo activo de los padres y madres.

Y me parece muy bien que así lo hagan. Es lo lógico. Los funcionarios saben que, ante la Administración, la fuerza radica en los usuarios de los servicios, los votantes, en este caso: los padres y madres. En mi experiencia personal, cuando ha habido un problema en el colegio de mis hijos, hemos sido los padres y madres los que hemos tenido que movernos activamente para solucionar el problema. Los funcionarios, siempre en segundo plano o en tercero. Salvo contadas excepciones. Individualmente, el funcionario tiene miedo de moverse demasiado. Y tal vez no le falte razón.

Los padres, de forma personal y responsable, podemos y debemos implicarnos en todo lo que afecte a la educación de nuestros hijos. Lo que no tengo tan claro es que también tengan que hacerlo las organizaciones que nos representan. La razón de ser de estas organizaciones, las APAs y sus Federaciones, es la defensa de los intereses del alumnado. Y una huelga no es precisamente lo que más interesa a nuestros hijos e hijas. Es más, estoy convencido de que se ejerce más presión a la Administración si el alumnado asiste con normalidad al centro educativo, y el profesorado y los padres que quieran y puedan se manifiesten a sus puertas en demanda de sus reivindicaciones. Sin utilizar a nuestros hijos ni perjudicar sus intereses. La huelga se convoca con suficiente antelación como para organizar actividades complementarias con la participación voluntaria de los padres que así lo deseen, por ejemplo. Eso sería una actitud responsable, a la que las organizaciones de padres estoy seguro que no pondrían objeción.

El tema de la Plataformas conjuntas es muy espinoso. Lo padres y madres somos fácilmente manejables por las organizaciones sindicales. Éstas mezclan entre sus justas reivindicaciones otras peticiones que ya no lo son tanto y que repercuten directamente en la calidad de la enseñanza y educación de nuestros hijos. Y cuando la Administración cede ante nuestra presión, se introducen en las negociaciones esos postulados a los que nosotros y nuestras organizaciones nos oponemos, como es el caso de la jornada continuada. Y si no, al tiempo.

Así es que, yo digo: movilizaciones, las que sea. Pero de forma responsable. Yo soy padre de alumna. Y miro por los intereses de mi hija. Comprendo y apoyo los motivos de la huelga. Pero no estoy de acuerdo en que ella, como alumna, la secunde. No tiene ni la edad ni la responsabilidad para ello. Y ni yo, como padre, ni nadie tiene el derecho de utilizarla, para nada.

Hagamos lo que haga falta de forma conjunta, padres y profesionales. Pero unos junto a otros, no unos delante y otros detrás. Porque luego, a la hora de sentarse a negociar, los que se arrogan el derecho a hacerlo son los sindicatos. A los padres nos olvidan. Y creo yo que algo tendremos que decir los padres de la educación que queremos para nuestros hijos, ¿no?

De todas formas, muchas veces el problema está dentro de los Centros.

Podéis opinar.

jueves, 9 de abril de 2009

El "Pacto por la Educación"

Cuando ayer leía que el nuevo ministro de Educación, Ángel Gabilondo, propone un "gran pacto por la Educación", pensé: "¡ya era hora!". Luego, mientras leía el resto de la información, se fue desinflando mi alegría inicial dejando paso al convencimiento de que lo que más les urge ahora a los políticos es reconducir y acallar las voces de los descontentos con el Plan Bolonia.

Sé que la reforma del sistema universitario es un tema de máxima importancia, que determina y repercute en el futuro de mucha gente que está ahora en proceso de formación, así como a la que se incorporará en el futuro. Pero eso es el tejado del edificio. No hay que descuidarlo, claro está. Pero los cimientos tienen problemas que afectan a toda la estructura: si no se pone remedio, de poco va a servir que se arregle el tejado.

En España hemos avanzado mucho educativamente hablando a partir de la implantación de la democracia. Pero hay una tendencia que, desde el principio, afecta al rendimiento y a la consistencia de Sistema Educativo. Con cada cambio de partido político en el Gobierno, hemos tenido una nueva Ley educativa. Cada una de esas leyes respondía más al ideario de ese partido en el poder que a un planteamiento serio y consensuado en el que se tuviesen en cuenta las necesidades de los usuarios, de los profesionales y del tejido productivo, económico y cultural de la nación.

Prueba de lo mucho que debe mejorar el Sistema son los resultados que arrojan cifras intolerables.

Espero que los responsables políticos se pongan de acuerdo y promuevan un cambio de actitud para llegar a acuerdos duraderos. Para ello, es la sociedad quien tiene que reaccionar.

jueves, 26 de marzo de 2009

¿De quién es la culpa?

Estoy un poco harto, la verdad, de volver sobre el asunto, pero no tengo más remedio que dar mi opinión sobre este tema. Y digo que es mi opinión, por si alguno de los que leen esta bitácora (cosa que agradezco) creen que yo pretendo sentar cátedra.

He leído en el diario Información lo que todos sabemos: que la tasa de fracaso escolar (el nivel de abandono de los alumnos sin conseguir graduarse en ESO) ronda el 44% en la provincia de Alicante.

Es alarmante, de verdad. Y ¿qué es lo que hacemos todos? Mirar a los demás para señalarlos como culpables. Lo más facil: señalar al que gobierna. Ése es el único culpable.

¿De verdad creemos que con más dinero, con mejor infraestructura, con recursos TIC, con más profesores de Inglés, etc., etc., se soluciona el tema?

¿Es que los alumnos pierden el interés por el estudio y por su educación por todo eso?

¿Cuándo vamos a empezar a mirarnos, cada uno en nuestra área de responsabilidad, y preguntarnos qué actitud tengo yo ante la educación? ¿Qué es y qué significa educar? Y ¿para qué?

¿Qué es lo que motiva a los niños y jóvenes a participar en algo? ¿Y a nosotros?

¿No será que no tenemos ni idea de lo que estamos haciendo? ¿no será que nos estamos limitando a politizar este tema? ¿No nos estamos olvidando de lo principal: los niños y niñas, nuestros hijos e hijas, nuestros alumnos y alumnas?

¿Cómo tenemos la osadía de exigir a los demás lo que no somos capaces de llevar a acabo en nuestro entorno personal? El padre o la madre que no es capaz de comunicar con sus hijos, ¿no tendría que aprender a hacerlo? El profesor o maestro que no tienen ni idea de cómo conectar con sus alumnos, de hacerse querer y respetar por ellos, ¿no tendría que aprender a hacerlo? Y para ello, ¿no tendríamos que admitir unos y otros que no sabemos?

Los tiempos han cambiado, la sociedad ha cambiado; los métodos educativos, las actitudes pedagógicas, NO.

¡Ya está bien de lamentarse! Que cada uno haga sus deberes y unamos los esfuerzos y los objetivos para solucionar esto: no esperemos que empiecen los demás. ¡Estamos perdiendo el tiempo!

Los que ya lo hacen, los que obtienen resultados, se encuentran solos y, muchas veces vilipendiados. Hay mucho quehacer. Empecemos por lo inmediato. Seamos honestos. Los niños son personas, y no pueden esperar a que nos decidamos.

lunes, 16 de marzo de 2009

Elisa Roche


Me acabo de enterar del fallecimiento de Elisa Roche. Y no tenía ni idea de quién era. Ni a qué se dedicaba. Como la noticia estaba en la sección de Educación de El País, he supuesto que era una maestra o algo relacionado con la pedagogía.

Realmente Elisa Roche ha sido mucho más que todo eso. Al parecer ella ha sido una mujer adelantada a nuestro tiempo (el que vivimos en España, no en el resto del mundo civilizado), que quiso y no le dejaron reformar el sistema educativo del mundo musical.

No voy yo a repetir lo que podéis encontrar en sus fuentes. Podéis, por ejemplo, leer su artículo "Europa cada vez más lejos", publicado en el diario digital "docenotas" y que yo he encontrado en el web de la AMPA del Conservatorio Profesional de Música de Granada.

Y para comprender más a esta gran mujer y su influencia en el mundo de la enseñanza musical, podéis leer los comentarios en "el Weblog de Doce Notas."

Parece ser que se ha perdido una gran persona y una excelente pedagoga. ¿Cuánto nos queda para hacer caso a los que consiguen salir de la caverna?

martes, 10 de marzo de 2009

Pasión y apasionamiento

Pasión y apasionamiento tienen la misma raíz y significados correlativos. Pasión puede significar sufrimiento y también gran afición. Apasionar puede significar atormentar o afligir, y también aficionarse con exceso por algo o alguien.

Las personas apasionadas son propensas a sufrir y a causar sufrimiento. En el plano personal, el de los afectos, la gente apasionada se mueve entre dos extremos de gran apego y de gran rechazo, y suelen ser emocionalmente desequilibradas. En algunas ocasiones van del extremo de gran euforia a gran depresión, sin casi transición.

Las pasiones, los sentimientos desaforados, no sujetos a la razón, son causa de sufrimiento más que de alegría. Es una de las metas de la Educación el aprender y enseñar a gestionar los sentimientos y emociones para no ser esclavos de sus vaivenes, y no sufrir ni causar sufrimiento a los demás con sus altibajos.

Hoy, igual que antes, es necesario comprender esto y ponerlo en práctica. Cada día vemos ejemplos de este fenómeno, sobre todo en la política y en la religión. Toda esta reflexión que ahora estoy haciendo viene a cuento de lo que está pasando en mi ciudad, en Ibi, a raíz de la tormenta política desatada tras el desencuentro de dos personas del mismo grupo parlamentario con responsabilidades de gobierno en el Ayuntamiento.


Es una pena que, por el apasionamiento, se olvide el principal objetivo de la política, se olvide la responsabilidad de los elegidos por el pueblo para con el mismo pueblo, y se dejen llevar por la incultura y el apasionamiento de quienes creen que estamos en una batalla de patio de colegio. "Yo sé más", "yo puedo más".

¿Y aún dudan de la necesidad de asignaturas específicas para la "Educación para la Ciudadanía"?

miércoles, 4 de marzo de 2009

¿Mediación o expulsión?

En un mismo día me llegan dos formas de afrontar un problema que, por desgracia se hace más patente en nuestros días. Los casos de conflictividad en el ambiente escolar y académico.

Por un lado, leo que en la provincia de Alicante los institutos suman casi 800 casos de expulsados temporales. Esta medida de la expulsión parece ser apoyada por gran parte de la población, por muchos de los afectados, ya sean docentes o padres y alumnos sufridores del comportamiento disruptivo de algunos alumnos. En los comentarios de la noticia se puede apreciar el abanico de opiniones que suscita el caso.

Me quedo que el de Encarni:
"Los padres somos los primeros responsables de la educación de nuestros hijos, de eso no hay duda. Después la escuela y luego la sociedad en su conjunto. Todos educamos, no solo con lo que predicamos sino con el ejemplo.Partiendo de aquí tal vez no deberíamos de caer en la crítica fácil, en el juicio o mejor en el prejuicio. Hay chavales con problemas que no saben expresar lo que les pasa y que reaccionan desde las emociones, igual que los hay realmente con mala intención. No son " chusma", son personas que muchas veces necesitan que se les escuche.
Hay profesores- los más- que se preocupan por educar y por enseñar a personas, sus alumnos. Hay otros que se sienten tan perdidos como muchos padres ante el camio social y de valores que nos está tocando vivir; y hay otros que han elegido esa profesión porque es cómoda y tienen mucho tiempo libre con lo cual no se preocupan realmente por educar. Hay padres que ponen límites, los hay que no , los hay que si se quedan en casa con su hijo expulsado se arriesgan a perder su trabajo , y también los que no se preocupan para nada. No juzguemos a los demás sin saber. Cada caso es distinto a otro. Lo que hacen falta son profesionales que atiendan a los alumnos con problemas (psicólogos, educdores sociales...) .Hacen falta aulas de convivencia. Hace falta la implicación de padres, profesores, instituciones, administración,...Hacen falta ganas y recursos y sobre todo enseñar a nuestros chavales respeto desde el ejemplo, en casa, en la calle, en el colegio, en el parque..en este foro."
Autor: Encarni


Por otro lado, me llega una información que me hace pensar que tal vez necesitamos reflexionar sobre la necesidad de aprender otros métodos de afrontar los problemas. Me refiero a la mediación.

Esta es una frase que puede ser base para esa reflexión:
En las comunidades educativas existe una tendencia a evitar el afrontamiento de los conflictos y se suelen implementar medidas de carácter punitivo que en muchas ocasiones no resuelven el problema sino que lo acrecientan o endurecen. O sea, en muchos casos la escuela lleva a cabo procedimientos que resultan inefectivos a la hora de resolver los conflictos de los alumnos en particular y de la escuela en general.

Mi postura personal está más cerca de la mediación que de la expulsión, aunque reconozco que hay ocasiones en que no queda más remedio, e incluso es más eficaz, dar un toque fuerte de atención al alumno y a su familia mediante unos días de expulsión. En todo caso, cada uno de los conflictos tiene un forma propia y adecuada de resolución.

Podría decirse que expulsar ya sabemos, ¿verdad? Entonces, habrá que empezar por aprender a resolver los conflictos de una forma pacífica y educadora.